La vida en las ciudades de tamaño medio tiene más beneficios de los que se esperan. Precios más bajos, acceso a todos los servicios y mayor tranquilidad son algunos de ellos.

A pesar de ser las ‘hermanas pequeñas’ de las grandes capitales, las poblaciones de tamaño medio ofrecen más ventajas de las que pudiera pensarse. Tanto urbanitas de pro adictos al bullicio de la ciudad como vecinos de estos municipios de menor tamaño se han dado cuenta de que comarcas como l’Horta sud son perfectas para residir.

La vida en las grandes urbes está perdiendo su halo de cosmopolitismo en parte porque, gracias a la tecnología y las comunicaciones, uno puede sentirse igual de conectado en plena plaza del Atuntamiento de Valencia como disfrutando de un tranquilo paseo por el barranco de Paiporta.

Son muchas las ventajas de vivir en municipios de tamaño medio. A continuación te contamos algunas de ellas:

1. Más tranquilidad

El santo grial que todos los que abandonan las grandes ciudades persiguen. Y es que si se elige un municipio de tamaño medio para vivir, al cabo del día nos ahorraremos un buen número de atascos, ruidos, humos, empujones y demás percances cotidianos fruto de la prisa y el estrés de las grandes ciudades.

2. Bien comunicados

Para los que quieren “lo mejor de ambos mundos”, salir de Valencia no significa abandonarlo todo. Las comunicaciones permiten abandonar la gran ciudad en pro de la tranquilidad de otros municipios más pequeños, pero también llegar puntualmente al trabajo cada día o siempre que te apetezca visitar la capital.

3. ¡Piso nuevo!

Imagínate el placer que sientes al estrenar unos zapatos o una prenda de ropa, pero multiplicado a la enésima potencia. Estrenar casa es una opción mucho más asequible si se hace en los municipios de alrededor de Valencia.

4. Zonas que invitan a disfrutar del aire libre

Este es otro de los encantos de vivir fuera de Valencia. La posibilidad de disponer de zonas ajardinadas privadas o grandes terrazas donde descansar o, si se tienen niños, jugar con total tranquilidad. En el caso de la nueva promoción de Cubells Almenar en Paiporta, llamada Edificio Zaragoza.

Son muchas las jóvenes familias que sueñan con estrenar un piso de obra nueva.

5. Mayor cercanía con la naturaleza

Si nos alejamos lo suficiente de las grandes ciudades podemos sentirnos más integrados en el entorno algo que, según se ha demostrado, ayuda a mantener a raya el estrés y a lograr un mayor bienestar emocional.

6. Precio más bajo

Los precios en las ciudades de tamaño medio son mucho más asequibles que en Valencia capital. Así las cosas, para muchos jóvenes profesionales, especialmente aquellos que tienen familia o quieren fundarla, es mucho más beneficioso vivir en poblaciones de los alrededores.

7. Vida cultural en las ciudades medianas

Si crees que quedarse en casa es cosa de suecos aburridos y sigues interesado en un entorno inquieto con una vida cultura interesante y restaurantes a la última, la buena noticia es que esos incentivos ya no son solo patrimonio de las grandes ciudades. Las llamadas ciudades dormitorio han abandonado esa condición para convertirse en hervideros de iniciativas culturales que, además, son más cercanas y accesibles que las de la “capital”.

8. Acceso a servicios de calidad

Si nos ponemos serios y atendemos a lo fundamental, el área metropolitana de Valencia no tiene nada que envidiar al centro en materia de servicios públicos. Escuelas públicas, centros sanitarios y zonas comerciales hacen que no eches de menos nada en tu día a día.